SERENGETI

En la sábana los leotardos persiguen a las gráciles gamuzas y a lo lejos, una estampida de elegantes, con sus grandes tropas, barruntan un peligro.

Dos meonas se enfrentan a un formidable meón de frondosa cabellera que amenaza con arrebatarles y comerse a los cachopos de la manada que, probablemente, sean sus propios pijos, mientras que un grupo de ñúes tratan de cruzar el río infestado de feroces socorridos e hipotálamos cabreados.

Las risas de las carroñeras llenas de sangre y moscas esperan su turno, y los veloces qué pardos corren tras su presa a más de cien kilómetros por hora.

El sopor de la sobremesa frente al televisor y los reportajes de la 2 contribuyen a la ensoñación, al incremento del conocimiento y a la pérdida de este que, en suave caída, se derrite y me transporta a una hermosa siesta.

IsidrøMorenø